Walk-In: hago chas y aparece un tatuaje

Como siempre decimos, hay varias maneras de pensar sobre un tatuaje. Están las personas que pueden estar años pensando en la forma, línea y frase más adecuada, preguntando y preguntando y dibujándose a boli en la piel, y están las que, de un día para otro, mientras van en el metro camino al trabajo, deciden tatuarse una rana tocando el piano en un muslo porque les parece la mejor idea del planeta. Lo bueno es que todo es una opción respetable y genial; no hay que juzgar nunca un tatuaje ni propio ni ajeno. De hecho, nunca hay que juzgar el cuerpo de los demás; bastante complicada es la vida.

Así, hay personas que viven de la espontaneidad y son pasto del walk-in. Suena raro, pero no es nada negativo: un walk-in significa entrar a una tienda de tatuajes para hacerse un tatuaje en ese mismo momento si algún tatuador/a está libre. Vas por la calle un día cualquiera, ves una tienda de tatuajes que te gusta, se te ocurre ese símbolo que llevas tiempo queriendo hacerte, tienes un par de horas libres y… ¡Te decides!

walk-in tattoo

Los walk-ins funcionan muy bien si quieres hacerte un diseño flash, es decir, un diseño de los que hay disponibles en la tienda hecho por alguno de los artistas que tienen en su portfolio, o si quieres hacerte un diseño sencillo o pequeño. Por ejemplo, un mini tatuaje, una palabra, un tatuaje tipográfico o una figura geométrica. No hay que dudar, porque si en la propia tienda ven que no van a poder hacer la idea por complejidad o porque están totalmente ocupados, te lo dirán; lo primero es que el cliente quede satisfecho.

Un walk-in tiene un punto de originalidad y de aventura que hacen que el tatuaje sea bastante emocionante, aunque es importante que se piense un poco y se escuche al profesional del tattoo para no arrepentirse después; no te aconsejarán hacerte ni nombres de parejas, ni tatuajes en lugares comprometedores, porque las consecuencias pueden ser nefastas.

El proceso del tatuaje será el mismo que el de un tatuaje previsto; en eso no cambiará nada. Por tanto, si ves que te apetece, no dudes en entrar a preguntarnos y hacer un walk-in. ¡Nuestra puerta está abierta para ti!